La música era un elemento que estaba todo el rato presente, cuando era la hora del patio las profesoras ponían el disco de música y los alumnos empezaban a cantar y a bailar. Era increíble como pasaban de estar jugando tranquilamente a dar saltos y ponerse a aplaudir y gritar cuando oían la música. Les encantaba, les hacia sonreír y divertirse, ademas, nunca de cansaban de hacerlo, podían estar horas y horas escuchando música y cantando. En clase también estaba muy presente la música , en cada clase tenían un cuento relacionado con la estación en la que estaban , a mi me toco otoño y todos los días al empezar la clase cantaban la canción del cuento que era esta:
"Otoño llegó marrón y amarillo,
otoño llegó y hojas secas estampó.
El viento en otoño sopla y soplará,
con sus hojas secas nos hace jugar.
Otoño llegó marrón y amarillo,
otoño llegó y hojas secas estampó."
No solo les gustaba oír la música que provenía del CD sino que también les encantaba oír cantar a las docentes y a nosotras, las alumnas de practicas. Las canciones que mas solíamos cantar eran las de cantajuegos ( un grupo de cantantes que se dedican a hacer vídeos dedicados a los niños cantando las típicas canciones infantiles). Como yo tengo varios primos pequeños a los que les canto mucho me sabia muchísimas canciones así que no paraba de cantar, un día hasta me quede afónica. Ademas, cantando no solo disfrutan ellos sino que disfrutas tu también porque verles a todos mirándome y cantando a la vez que yo me hacia muy feliz y de alguna manera también liberaba tensiones, ademas las canciones infantiles son muy divertidas y los bailes que las acompañan también.
Cuando finalizó mi periodo de practicas me puse muy triste porque había cogido muchísimo cariño a esos renacuajos, y lo primero que pensé fue:
¿¡A quien voy a cantar yo ahora?!
No hay comentarios:
Publicar un comentario